Dios El único y verdadero Dios que se ha revelado como él (YO SOY) que existe por sí mismo (Éxodo 03:14). Dios se ha revelado a sí mismo existiendo eternamente en tres divinas personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo, que tienen la misma naturaleza, atributos y perfecciones, y son dignos del mismo homenaje, confianza y obediencia. Dios es el creador de todo lo que existe, tanto visible como invisible, y por lo tanto es digno de toda Gloria y Alabanza. Dios es Espíritu infinito, eterno e inescrutable en hacer servicio, en amor, poder, santidad, bondad, conocimiento, sabiduría, justicia y misericordia. Él es inmutable y por lo tanto es el mismo ayer, hoy y mañana y por la eternidad.

Jesucristo  Dios se nos ha revelado a través de su hijo, Jesucristo, que es la imagen visible del Dios invisible. Jesucristo es verdadero Dios y verdadero hombre. Fue concebido por el Espíritu Santo y nacido de la Virgen María. Al morir en la cruz, el justo por los injustos, hizo expiación de nuestros pecados, por su sangre derramada. Él, habiéndose entregado a sí mismo para limpieza de nuestros pecados, se levantó de los muertos conforme a las Escrituras y se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas como nuestro Sumo Sacerdote.

Espíritu Santo Que el Espíritu Santo es una persona divina enviada para habitar, guiar, enseñar y capacitar al creyente, y convencer al mundo de pecado, de justicia y juicio. El Bautismo en Espíritu Santo y fuego, es la promesa del Padre para todos los creyentes y con él viene la investidura de poder para servir en santidad. Esta unción maravillosa es distinta y subsiguiente a la experiencia del nuevo nacimiento. El Bautismo en el Espíritu Santo en los creyentes tiene como evidencia inicial la señal física de hablar en otras lenguas como el Espíritu les da que hablen.

La humanidad, su caída y redención El hombre fue creado a la imagen y semejanza de Dios, pero cayó, en transgresión por causa de la desobediencia. Y como consecuencia de su pecado perdió su vida espiritual y quedó sujeto al poder de Satanás. Todos los hombres nacen con una naturaleza pecaminosa y están separados de la comunión con Dios. Pudiendo ser salvos únicamente por el arrepentimiento de pecados y la Fe en el sacrificio vicario de Cristo en la cruz del calvario.

Salvación Jesucristo vino a reconciliarnos con Dios. El vivió una vida sin pecado y voluntariamente murió en la cruz para pagar el castigo por nuestras transgresiones. Dios lo resucitó de entre los muertos y ahora, por gracia, ofrece como un regalo gratuito la vida eterna a todos los que en él creen como su Señor y Salvador. Es por eso que la salvación solo se puede encontrar en Jesús.

La Iglesia La Iglesia está compuesta por todos los creyentes en Cristo, nacidos de nuevo, desde el Día de Pentecostés. Su Misión es proveer comunión y edificación a los santos y comunicar el Evangelio a todo el mundo por medio de una vida y testimonio cristiano.

La Venida del Señor Jesucristo Jesús prometió a sus discípulos que él regresaría otra vez (Juan 14:1-4). Los ángeles prometieron que Jesús regresaría (Hechos 1:10-11). El vendrá en una nube con poder y gran gloria y todo ojo le verá. Jesús descenderá del cielo; y los muertos resucitarán primero. Luego los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes.